Proyectos actuales
… de una obra de prueba en Limonest, municipio situado en la metrópolis de Lyon.
A principios de año, la dirección regional DR Centro-Este ha dirigido, junto con su cliente Eau du Grand Lyon, una obra de prueba de cara a lo que será el futuro de nuestro sector.
Una oferta técnica alternativa cada vez más amplia y un cliente exigente
La oferta de materiales verdes para el sector de las obras públicas alcanza ya un nivel de madurez que permite considerar seriamente nuevas formas de trabajar en nuestros sectores de actividad.
La clara apuesta de la metrópolis de Grand Lyon en pro de la transición energética —en cumplimiento de la normativa relativa a las zonas de emisiones bajas—, así como el compromiso de la empresa Eau du Gran Lyon en esta iniciativa han sido los principales detonantes.
Un estudio con innumerables retos
Esta prueba es la primera fase de un estudio comparativo de distintas técnicas alternativas para la ejecución de nuestras obras. El objetivo es evaluar su impacto en los siguientes ámbitos:
- Medioambiental: huella de carbono, ruido;
- Social: condiciones de uso, evolución de las prácticas, percepción por parte de los vecinos;
- Financiero: respeto de los ritmos de trabajo, gastos de funcionamiento e inversión.
Esta iniciativa se integra perfectamente en la responsabilidad social de empresa del Grupo Sade.
1 obra, 3 técnicas y 3 zonas
La prueba se llevó a cabo en una obra de renovación de canalización y con 23 conexiones de agua potable. La mitad de las conexiones (12) se realizaron siguiendo la técnica tradicional con motores, vehículos y materiales térmicos. La otra mitad (11) se realizaron con motores, vehículos y materiales que funcionan con energías alternativas (electricidad y gas natural). Por último, también se estudió la técnica de perforación sin zanjas dirigida atravesando una vía departamental.
Unos primeros resultados prometedores
Actualmente se están analizando y compilando los resultados de este estudio científico. No obstante, habida cuenta de los primeros datos, el uso de motores verdes para este tipo de obra es prometedor. La autonomía, la fiabilidad y una mejor calidad de vida laboral (nivel sonoro) están garantizadas. Todas estas ventajas han hecho que el equipo dé su visto bueno a estos cambios futuros.
Un gesto más a favor del planeta medido, firmado y certificado por SADE.
Unas medidas de alta tecnología
En la obra se instalaron unos sensores autónomos e-Lichens, inventados por una empresa emergente de Grenoble y promovidos por SADE Ingeniería, que son sencillos de instalar y se alimentan de paneles solares. Estos sensores permitieron medir, en el recinto de la obra y en el exterior, diversos parámetros medioambientales (emisiones de carbono, nivel de ruido, etc.). Uno de los retos más significativos del sector era la disminución global de las molestias acústicas, por lo que una oficina técnica externa diseñó una campaña de medidas complementaria.